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La clasificación internacional del funcionamiento, de la discapacidad y de la salud.

22 febrero, 2021

La clasificación internacional del funcionamiento de la discapacidad y de la salud (CIF) tiene como finalidad brindar un lenguaje estandarizado y verídico a nivel mundial, con el fin de entender el funcionamiento del individuo y la discapacidad como criterios relevantes en el área de la salud.

El área de la salud abarca muchas profesiones con sus respectivas especializaciones, esto es debido a la complejidad del cuerpo humano, ya que cada parte que lo conforma hace que el ser humano sea alguien funcional, con capacidades de desenvolverse en el entorno. Por esta razón es de suma importancia que todos los integrantes del área de la salud tengan conocimiento de la CIF, para poder tener un orden y que todos hablen en un mismo idioma.

La CIF pretende que el funcionamiento y la discapacidad sean tomados como consecuencia de la relación entre la condición de salud de cada individuo con su entorno físico y social. Abarcando todas las estructuras o partes anatómicas como órganos y extremidades y las funciones corporales incluyendo las psicológicas, refiriéndonos al organismo humano como un todo. Una vez tenemos identificada esta parte, pasamos a analizar las actividades que realiza la persona y que limitación hay en ellas, si las puede ejecutar sin dificultad o con limitaciones que abarcan desde leve hasta grave en términos de calidad, esto representa la perspectiva del individuo respecto al funcionamiento. Por último, observamos cuál es la participación a nivel social y familiar de la persona, considerando los problemas que pueda tener para desenvolverse en situaciones vitales como desempeñarse en un empleo.

La CIF además abarca una serie de conceptos que son fundamentales para el individuo, tales como, bienestar que incluye los aspectos físicos, mentales y sociales, entendiendo estos como una buena calidad de vida, ya que permiten que el individuo esté en la capacidad de habla, de recordar, de ver e interactuar con los demás. Incluye también los factores personales como la edad, el sexo, el nivel social y también los factores ambientales, que es el componente que refleja los aspectos externos que forman el contexto de la persona y como el entorno facilita o limita la participación de la persona en la comunidad.

Otro de los conceptos relevantes que aporta la CIF es la condición de salud, en este se encuentra la enfermedad crónica-aguda, traumatismos, lesiones; de esta manera la condición de salud de cada individuo se ve alterada cuando aparece el dolor, sufrimiento o presenta limitación para realizar las actividades básicas cotidianas como lo son el aseo personal, la alimentación o el uso del baño.

La aplicación de la CIF tiene como objetivo:

  • Proporcionar una base científica para la comprensión y el estudio de la salud y los estados relacionados con ella, los resultados y los determinantes.
  • Establecer un lenguaje común para describir la salud y los estados relacionados.
  • Permitir la comparación de datos poblacionales.
  • Proporcionar un esquema de codificación sistematizado para ser aplicado en los sistemas de información sanitaria.

Dentro del manejo sistemático brindado por la CIF, algunos de sus usos en los diferentes campos aplicables son:

 

  • Estadística encuestas y estudios de población o en sistemas de manejo de información.
  • Investigación para medir resultados, calidad de vida o factores ambientales.
  • Clínica en la valoración de necesidades, para homogeneizar tratamientos con condiciones específicas de salud, en la rehabilitación de los pacientes y en la evaluación de resultados.
  • Política social en la planificación de sistemas de seguridad social, sistemas de compensación, y para diseñar e implementar políticas.
  • Educación para diseño del “currículum”, y para aumentar la toma de conciencia de la sociedad y para poner en marcha actividades sociales.

El uso de la CIF ha modificado la forma como entendemos la discapacidad y la enfermedad, pues nos da a entender que una persona enferma no es necesariamente discapacitada o que una persona con discapacidad no es alguien enfermo. Ha permitido también establecer criterios para atender la calidad de vida, el estado de salud o el bienestar de un individuo en relación con su estilo de vida. Un instrumento no solo en el proceso de rehabilitación, sino también en el ámbito científico, social, cultural y político.

 

 

 

 

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